La herejía del rapto o el arrebatamiento de la iglesia II
Haciendo un bosquejo y análisis de la historia de la fe del Mesías Jesús y sus comienzos, nos encontramos que la nueva fe que nació en el siglo I, desde sus mismos inicios fue perseguida; podemos leer en el libro de Hechos lo que sucedió después de que Esteban fue apedreado y lo que se dio inicio a partir de allí: Hechos 8:1“… En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.”
Como se puede apreciar, la reciente nueva fe era atacada con furia, y probada en el fuego, ya que el enemigo de Dios no podía permitir que esa fe existiera, no se podía permitir que se desarrollase, y debía destruirla, y no darle oportunidad alguna, es así, que daba inicio la primera tribulación, ordenada por el gran Sanedrín de Jerusalem.
Es necesario entender, que así como Dios autorizo y permitió que en los inicios hubiera tribulación y persecución, contra los primeros creyentes, también la habrá en el tiempo del Fin, por eso se dice en el Libro de Apocalipsis 6:9-11: “Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos."
Como se puede apreciar, nuevamente va a volver a haber persecución como las han habido a través de la historia en distintos tiempos, como la hubo en tiempos de los antiguos emperadores romanos, o de diferentes reyes paganos, o con distintos papas, y no solo eso, hay un número de personas que van a ser muertos, como los consiervos y hermanos de otros tiempos. ¿Qué significa eso? Que Dios Todopoderoso, ha autorizado y permitirá que esta persecución que viene se dé, por eso claramente se les dice a los creyentes de otros tiempos que fueron muertos por causa de la Palabra de Dios y por el testimonio que tenían, que “descansasen todavía un poco de tiempo hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.”
Del mismo modo que el oro se prueba y se purifica en el fuego, también la Fe se prueba en el fuego de la persecución, en la tribulación, no en la comodidad, no en la tranquilidad del hogar, no en la paz, no en un día soleado, sino en la tormenta, en la tempestad, en el huracán.
Así que, como podemos apreciar, la persecución y tribulación contra los creyentes viene, y es deber de cada uno prepararse, y apartarse de cualquier engaño y mentira que pretenda hacer creer, que Dios no va a permitir que sus hijos sufran y pasen por la tribulación, porque el testimonio de la historia es que la fe debe probarse, y eso tiene un sentido, ya que el trigo ha crecido junto con la cizaña, han convivido juntos y se debe saber quién es quién, quien es trigo y quien es cizaña; pero han querido engañar que porque supuestamente son hijos de Dios, Dios no va a permitir que sufran, olvidando la bienaventuranza del Mesías Jesús:
Mateo 5:11-12 “Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.”
